¿Qué tal si las bases de mi seguridad las sitúo dentro de mí y no en
circunstancias cambiantes? Si trabajo para conocerme, vivir en confianza y
desarrollarme con naturalidad, bailaré con los cambios de la vida,
aprovechándolos como una oportunidad, como aprendizajes.
Mejorando las Relaciones
“Para relacionarme bien, primero tengo que
conocerme, aceptarme y quererme”.
Párate y siente lo que realmente te apasiona
Recuerda también la importancia de celebrar tus logros a lo largo del camino. Cada paso que das hacia el logro de tus metas es un motivo de celebración. Reconoce tus progresos y recompensarte por tu arduo trabajo.
Seguir leyendoEl camino hacia el autodescubrimiento
Permítete crecer, y evolucionar a medida que te sumerges más profundamente en tu ser. Mantén una actitud abierta y curiosa, y cultiva la compasión hacia ti mismo en cada paso del camino. Estoy aquí para apoyarte y ser tu compañera de viaje. Mi compromiso es ayudarte a descubrir tu auténtico yo, a tomar decisiones conscientes y acompañarte hacia una vida plena de significado y propósito.
Seguir leyendoImpermanencia
Cambio en los 25 y en la madurez
Si hay un concepto que me llega con claridad del budismo es el de la IMPERMANENCIA: en la vida absolutamente nada permanece, todo está sujeto a un cambio constante. Sin embargo, hay épocas de nuestra vida en las que el cambio se hace especialmente patente.
Una de ellas es la etapa postuniversitaria, o en todo caso, cuando dejamos de ser estudiantes, no podemos aferrarnos a la despreocupación, buscamos integrarnos en el mundo laboral sin saber con claridad qué queremos, y sobre todo, desde dónde lo vamos a hacer.
Muchas veces se produce un movimiento automático y tomamos decisiones sin demasiada reflexión y otras, en cambio, con mucha carga mental.
Propongo PARAR (en realidad, lo propongo siempre), y atender a nuestro criterio íntimo que conoce nuestros talentos y pasiones, nuestras habilidades y flaquezas, y desde ese lugar, ir afrontando nuestras elecciones.
Se trata de hacerse “ADULTO” y puede aparecer una de las primeras sensaciones de vértigo existencial: de repente me tengo que hacer cargo de mí, tarea apasionante si se aprende a vivir como un reto, en un continuo diálogo entre la VIDA y mi SER más profundo.
Llenemos esa sensación de vacío de lo que realmente queramos: entreguémonos a nuestra actividad, busquémosle su sentido, hagamos de nosotros alguien que nos guste, elijamos pareja sólo si es lo que queremos y sentimos, construyamos a alguien consciente de su valor y construiremos un mundo también valioso.
Y otro de los momentos clásicos en la vida en que aparece el cambio unido a una sensación de vacío es en la madurez: quizás nos hayamos estabilizado profesionalmente, hayamos criado a nuestros hijos, casi pagado la hipoteca, dejado de mirar a nuestra pareja…..síndrome del nido vacío, o lo que es lo mismo: ¿Qué hago ahora con mi vida después de habérmela pasado en un hacer constante?
¿Qué sentido tiene ahora mi vida? ¿Qué propósito? Y todo esto acompañado de vaivenes hormonales que no lo hacen más fácil.
¿Y ahora qué?
¿Paramos? Vamos a contactar con la VERDAD silenciosa que somos: no hay un tiempo vivido o por vivir, con unos planes más o menos definidos. Hay VIDA y sólo contactando con su latido diario podemos actualizar nuestra potencia y sentir nuestra propia plenitud.
Una brújula para encontrar el Norte
¿Para qué sirve un proceso de coaching personal?
La respuesta surge sola: para VIVIR. Vivir desde tu centro, atendiendo tu propio criterio, consciente de quién eres, de tus infinitas posibilidades, de la energía dentro de ti.
Parecía que vivir era algo que se haría solo, bastaba con afrontar cada día. Pero un día, no sabemos qué nos pasa, que deja de hacerse con facilidad, con gusto, y empezamos a sentir la cuesta arriba de las dificultades, la desgana, la falta de ilusión. Desaparece la alegría natural, el disfrute de ser y por más quehaceres que inventamos no conseguimos llenarnos. ¿De qué?
Te propongo un viaje desde dentro hacia fuera: conocerte bien para realizar tu mejor versión. Guiarte por tu maestro interior para comprenderte, amarte y construir tu vida.
El autoconocimiento, el amor a ti mismo, la autenticidad, la compasión, serán nuestras herramientas. Suspendemos los juicios y sentimos nuestra verdad. Y desde ese lugar, surgirá lo demás:
- RESPETO A UNO MISMO
- AUTOESTIMA
- RELACIONES SANAS
- PROYECTOS PERSONALES Y PROFESIONALES
- INTEGRACION DEL DOLOR
- ILUSION POR CADA DIA
- ACEPTACION DE LA REALIDAD
- MANEJO DE LA ANSIEDAD
El viaje que propongo no tiene fin, pero encontrarás tu brújula y sabrás hacerlo solo, sin límites.